Angela Vivanco se integrará al máximo tribunal en reemplazo de Patricio Valdés. Su nombre provoca resquemores en el mundo de la izquierda por su pública postura contra la píldora del día después y la ley de interrupción voluntaria del embarazo en 3 causales. Pero sus adherentes en el Senado defendieron su “derecho a pensar distinto” y destacaron su “visión moderna y vanguardista del derecho”.
El nombramiento de Vivanco requería del voto de los dos tercios de los miembros en ejercicio del Senado (vale decir 29 de los 43). Finalmente alcanzó 30, provenientes de Chile Vamos, la Democracia Cristiana, algunos PPD y el ex presidenciable de la Nueva Mayoría, Alejandro Guillier.
En contra hubo 8, correspondientes a los senadores socialistas (Isabel Allende, Alfonso de Urresti, Alvaro Elizalde, Carlos Montes y Rabindranath Quinteros), la PPD Adriana Muñoz, Alejandro Navarro (PAIS) y el Juan Ignacio Latorre (RD). También se registraron 2 abstenciones: El PPD Ricardo Lagos Weber y el PS José Miguel Insulza.
El nombre de la abogada UC provoca resquemores en el mundo de la izquierda por su perfil ultraconservador. Tuvo una pública postura contra la entrega de la píldora del día después, además representó a los diputados de Chile Vamos en su presentación ante el Tribunal Constitucional contra la ley de interrupción voluntaria del embarazo en 3 causales. En su oportunidad, planteó que “el derecho al aborto no existe en la Constitución ni en los tratados internacionales”.
Además, fue candidata a diputada por Renovación Nacional en 1997, pero sólo obtuvo el 4% de los sufragios en el entonces distrito 27 (El Bosque, La Cisterna y San Ramón). Pero antes fue presidenta de la extinta Unión de Centro Centro fundada por el controvertido empresario Francisco Javier Errázuriz y abogada de sus empresas.
Vivanco es doctora en Derecho y Ciencias Sociales por la Universidad de La Coruña, España, y especializada en bioderecho. Además, ha sido columnista en El Líbero, donde ha escrito artículos como “La peligrosa ensoñación constitucional”, “El futuro de la protección constitucional de la vida humana” o “La televisión pública, ¿es de todos o de algunos?”.
La nueva integrante de la Suprema asumirá en reemplazo de Patricio Valdés en el cupo destinado a “abogados externos” al Poder Judicial.
Durante el debate, el senador Felipe Harboe (PPD), integrante de la Comisión de Constitución, destacó el curriculum de la postulante y anunció su apoyo con esta frase: “No comparto su visión en muchas materias, pero no me siento con el derecho de vetar la posibilidad de que llegue al máximo tribunal por su forma de pensar”.
En la misma línea, los DC Francisco Huenchumilla y Ximena Rincón defendieron la idea de votar a su favor pese a que tienen posturas distintas, mientras Luz Ebensperger (UDI) fue más allá y celebró su “visión moderna y vanguardista del derecho”.
Por su parte, el independiente Pedro Araya minimizó la posición contra el aborto de Vivanco, señalando que “el Senado no puede sancionar a una persona por el pensamiento que tiene”, llegando a comparar su caso con el bloqueo para llegar al máximo tribunal que sufrió el emblemático Carlos Cerda, célebre por su rechazo a la dictadura.
El ex candidato presidencial de la Nueva Mayoría, Alejandro Guillier, también se plegó a los apoyos, señalando que Vivanco es una persona “meritocrática, ha sacado a su familia adelante” y minimizó su cariz conservador asegurando que “Chile requiere jueces con opinión, que expresen la diversidad”.
En la vereda de los detractores, el presidente del PS Alvaro Elizalde, subrayó el “rechazo de la bancada” a nombre de todo el lote socialista (aunque finalmente José Miguel Insulza optó por la abstención). El senador por el Maule dijo que mientras las mujeres en el país están luchando por más igualdad, Vivanco “va en la línea contraria” porque es una “activa opositora de proyectos emblemáticos para la sociedad”.
En una muestra de la fragmentación opositora, el PPD Guido Girardi recordó que hace dos semanas se reunieron los senadores de la Nueva Mayoría y acordaron apoyar a la candidata del Gobierno. «Por lo menos mi palabra se cumple”, dijo en alusión al PS.
Desde la derecha también apuntaron al partido presidido por Elizalde y de hecho Víctor Pérez (UDI) acusó que «todos estuvieron de acuerdo hasta hace dos horas». De paso, acusó que el socialismo «dio una demostración de falta de palabra».
Pese al acuerdo develado por Girardi, la postura PPD en definitiva no fue unánime, porque el senador Ricardo Lagos Weber decidió abstenerse, subrayando que “en la Suprema debe estar representada la diversidad de Chile, pero en ciertos parámetros”, mientras su colega Adriana Muñoz se manifestó en contra: “Vivanco es una persona que ha actuado gravitantemente todos estos años en contra de la agenda de género”.
Otra de las voces disidentes fue Juan Ignacio Latorre (RD) , quien se opuso a la nominación planteando que “hay un acuerdo entre las bancadas para esta elección” que a su juicio se explicó por la “lógica del binominal y del cuoteo”. “Vivanco es una activista y militante conservadora que no da garantías de imparcialidad”, disparó.
Con la nominación de Vivanco zanjada, ahora el Presidente Piñera tendrá que elegir a los ministros que reemplazarán a Carlos Cerda y Milton Juica.