Articulos / Noticias

Presidente de la Suprema dice que se vienen tiempos «difíciles» y aboga a que «no primen intereses especiales»

[ssba]
7 de enero 2020

El nuevo mandamás del máximo tribunal también recalcó la importancia de contar con un nuevo Código Penal, dio por «superado» el conflicto con el TC, aunque aseguró que no se puede evitar que vuelva a ocurrir un nuevo roce.

«Soy un juez químicamente puro», dijo el ministro Guillermo Silva tras asumir formalmente la presidencia de la Corte Suprema.

Rodeado de distintas autoridades, el magistrado de 72 años, con más de cinco décadas en el Poder Judicial, entregó sus primeras palabras en el cargo, y reconoció que, debido al estallido social, los tiempos que se vienen son «difíciles».

Aseguró así que los últimos hechos «nos han hecho reflexionar respecto de nuestras propias obligaciones, actuaciones y deberes, y esto es un proceso que seguiremos haciendo con la tranquilidad y profundidad que Chile requiere».

Ya más tarde, detalló: «Por supuesto me habría gustado llegar en una época más tranquila. Los tiempos que se nos vienen encima van a ser, no me cabe duda, difíciles». Sin embargo, precisó que «con voluntad, diálogo, tranquilidad, comprensión, que no primen intereses especiales» y que cada cual ceda «un poco en sus posiciones para llegar a un acuerdo» se permitirá «salir de lo que estamos viviendo».

Aquellos dichos tuvieron buena recepción en el ministerio de Justicia, desde donde el ministro Hernán Larraín valoró el mensaje «de entender que vivimos un periodo nuevo, de renovaciones, donde instituciones como la Corte Suprema son fundamentales».

«Por eso saludo al nuevo presidente y me alegro mucho de su disposición de renovar esfuerzos jurisdiccional, siempre apegando en el derecho, para hacerse cargo de la nueva realidad que vive el país. Creemos que eso es una señal de madurez institucional», zanjó Larraín.

Código Penal, conflicto con el TC y nombramiento

Silva aprovechó la instancia para abordar ciertos temas pendientes, como un nuevo cuerpo penal, como también ciertos conflictos con el Tribunal Constitucional (TC).

Así, el presidente la Suprema indicó que el actual Código Penal data de 1874 y que, a través de los años, este se ha «ido parchando»

«Todos estos delitos nuevos, de lavado de activos, trafico de estupefacientes, se han ido contemplando en leyes especiales, y son delitos nuevos y de mucha ocurrencia. Así que tiene que hacerse un Código Penal nuevo, no podemos esperar más», acotó.

Ya refiriéndose al conflicto de competencias con el TC, Silva dio por superado el episodio, aunque aseguró que no se puede evitar que vuelva a ocurrir un nuevo roce.

Y es que en octubre de 2019 los ánimos al interior de ambos tribunales se complicaron. Por ese entonces, había emanado desde la Tercera Sala de la Suprema la idea de revisar fallos del TC vía acciones constitucionales, lo que fue descartado tajantemente por este último. Ya a los meses, otro fallo de la misma Sala de la Suprema descartaba la revisión.

«Eso (cambios de criterio) no lo podemos evitar, porque los ministros de la Corte Suprema no pensamos lo mismo en situaciones determinadas (…) el primer fallo de la Tercera Sala no fue unánime, acaba de salir otro que falló en sentido contrario, la composición de la Sala ha variado», sostuvo.

Y continuó: «Yo doy superado el problema. Son posiciones jurídicas en último término, todo depende en que se enfocan las cosas para evitar que se produzcan estos problemas que no le hacen bien a nadie».

Por su parte, la presidenta del TC, María Luisa Brahm, quien también asistió a la ceremonia, indicó que «es normal en las instituciones que en algunas materias se topan algunas atribuciones se produzcan diferencias de opinión, pero conversando, dialogando entre las partes, se conocen esas diferencias y se resuelven. Y así lo hemos hecho (…) y seguiremos haciéndolo con el presidente Silva».

Silva también señaló que su principal interés es abordar lo jurisdiccional, optando por una rápida administración de justicia, para así también mejorar la opinión que se tiene del Poder Judicial.

También destacó la importancia de un cambio en el sistema de nombramientos, aunque reconoció que es un trabajo que requerirá un largo camino: «Ese es un problema que viene desde hace ya largo aliento. Es un problema que nos interesa mucho solucionar, pero un problema de difícil solución, entonces no va a ser cosa de la noche a la mañana arreglar eso».

«Pero estamos preocupados (…) y a la larga el sistema de nombramientos va a tener que ser cambiado, pero no es algo que esté próximo», concluyó.

Sharing is caring!

Fuente: emol.cl